Tu historia de amor...

Delicada cirugia esta de querer, de tener continuamente que posponer tus deseos, delicada cirugia aquella de no desear nada, aunque sea sueños ajenos.
Detras de tus suspiros ocultas la ira de mi fracaso, la impotencia de tu incredulidad, la mentira que es la cordura, y la fantasia de cada segundo que representa el estar vivo.
Acurrucado entre los recuerdos conviven la distancia de los años que ya pasaron y el fino cordon que ata la realidad del ser con el concepto efimero, pero relevante del tener.
En tu mundo soy lo que poseo, soy lo que te brindo, soy la alfombra que da comododidad a tu sentada, el brasier que da realce a tus pechos, el coche que te pasea humeante y contaminado,  no soy mi rima ni mi sonrisa exagerada y bullosa, soy solo lo que hoy no tengo un puñado de billetes que posan en otra faltriquera no tan romantica, ni servicial pero es alfombra, brasier y coche humeante.

Quien?

Pienso mejor enmudecer mi diestra, para no arrastrar mas tinta
a ningun papel.
creo que solo me extrañare, mejor mi ego autocompasivo
generara su propio sicoanalisis.
seran mis ultimas letras esta queja por el anonimato
de mis versos, terminanara silenciando mi alma el apetito por
ser reconocido? o sere fuerte y esperare a mi madre cuando
aprenda a encender el ordenador y me diga cuan bien le sienta
leerme.

Enmudecido

Enmudecer al miedo y su voz
milenaria, robarle su espada
tracia con la que atraviesa
bondades, y hace gaseoso el
impetu.
Desmontar el andamio, el culto,
su puesta en escena, la dramaturgia
de su llanto, la ferocidad de sus fauces
que engulle sigotos de poetas, atisona
guerras y entrona dictadores.